viernes, 3 de enero de 2014

Canoa

San Miguel Canoa es un pueblo del estado mexicano de Puebla, ubicado a una distancia de 12 kilómetros al noreste de la ciudad de Puebla de Zaragoza, capital del estado, forma parte del propio municipio de
Puebla y en las faldas del Volcán Malintzin. Sus coordenadas geográficas son 19°09′07″N 98°06′11″O y según el Conteo de Población y Vivienda de 2005 llevado a cabo por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía tiene una población total de 14,158 habitantes. Hasta el 30 de octubre de 1962 tuvo el carácter de cabecera del Municipio del mismo nombre, pero el decreto de dicha fecha suprimió dicho municipio y lo incorporó al de Puebla.2

San Miguel Canoa es conocido por un hecho ocurrido el 14 de septiembre de 1968, cuando cinco jóvenes trabajadores de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla que realizaban una excursión para escalar el Volcán Malintzin, se refugian en el pueblo para pasar la noche, debido al mal clima que les impedía el ascenso; en ese momento México vivía la agitación del Movimiento estudiantil de 1968, entonces el párroco del pueblo acusó, sin fundamento, a los trabajadores de ser comunistas. ante esto, la población, sin tener entendimiento de la situación, resolvió lincharlos. En el acto también murieron otras personas, de los 5 trabajadores solo 2 sobrevivieron.3 Estos hechos fueron relatados en la película Canoa del año de 1975.





Published on Sep 14, 2011

Habitantes de Canoa quieren borrar de su historia la trágica noche del 14 de septiembre de 1968. Los más viejos evitan contar el negro capítulo del linchamiento a sus hijos, las autoridades buscan cómo atraer visitantes mediante el ecoturismo y ruegan al gobierno de Puebla y al federal por recursos para una universidad y fuentes de empleo.





Uploaded on Nov 13, 2011
Más Información sobre el Caso de CANOA http://www.izquierdamexicana.com/inde...

Realizada en 1975 y dirigida por Felipe Cazals.
Canoa está basada en una tragedia ocurrida el 14 de septiembre de 1968 en el poblado de San Miguel Canoa en el estado de Puebla.
Cinco jóvenes empleados de la Universidad Autónoma de Puebla intentan escalar el volcán La Malinche pero debido al mal tiempo no tienen éxito y tienen que refugiarse en un pueblo cercano llamado San Miguel Canoa (de allí el nombre de la película). Debido a la paranoia religiosa vivida en el pueblo en gran medida incitada por el párroco local, el pueblo los confunde con comunistas y deciden lincharlos.
Hasta la fecha los verdaderos responsables siguen libres y nunca pisaron la cárcel.
Mas informacion http://www.segen.buap.mx/au/tiempo/pa...


Fernando Pérez Corona

El 14 de septiembre de 1968, empleados de la entonces Universidad Autónoma de Puebla (UAP), Ramón Calvario Gutiérrez, Miguel Flores Cruz, Julián Gonzlez Báez, Jesúss Carrillo Sánchez y Roberto Rojano Aguirre, salieron rumbo a La Malinche y tuvieron que quedarse en este pueblo, debido a un aguacero.

Trataron de conseguir morada en la Presidencia y en el templo, pero se las negaron. En una tienda, Odilón García García les propuso quedarse con su hermano Lucas. Para entonces, el rumor sobre que eran comunistas, había sido propagado por el sacerdote Enrique Meza Pérez.

Los jóvenes entraron a la casa 9 de la calle Benito Juárez y minutos después empezaron a sonar las campanas del templo. Cuando empezaban a cenar, una turba con pistolas, machetes, palos y piedras llegó a la vivienda. Lucas abrió la puerta y un golpe de pala en el cuello cortó su vida. Jesús y Ramón también fueron asesinados.

Al ver tendido a su esposo, Tomasa tomó a sus tres hijos y huyó. La gente con antorchas en mano, ató y arrastró a Julián, Miguel, Roberto y Odilón, quien pereció de un disparo a quemarropa en la cara. Julián recibió un machetazo en su mano izquierda que le amputó cuatro dedos. Roberto y él fueron abandonados en la calle. Perdieron el sentido. Creyeron que estaban muertos. Miguel casi muere; pero llegaron soldados y policías, evitaron el crimen y rescataron a los sobrevivientes.

Para entonces, Alberta Guadalupe García Arce tenía sólo siete meses de edad. No recuerda nada. Sin embargo, a casi un lustro de distancia, no ha olvidado ni uno solo de los 17 nombres de los asesinos de su padre, esos nombres que le enlistaba su madre cada vez que el pulque le hacia recordar.

La mujer de 45 años recuerda que cuando tenía 15 años, la película Canoa de Felipe Cazals fue exhibida en la comunidad, en una vivienda. El lugar estaba lleno. Su prometido, la llevó. Cuando empezaron el linchamiento entró en crisis. Nadie sabía que era la hija de Lucas. La proyección quedó trunca. Después de casi 30 años, hace unos meses compró un DVD pirata y terminó de ver la producción. Sin remedio, volvió a sentir sed de venganza; pero, igual que en otras ocasiones, dejó el futuro a Dios.

Alberto vive en Canoa, a dos calles del templo dedicado a San Miguel Arcángel. Es la única de los tres hermanos que vivieron la tragedia, que regresó a Canoa, en cuyo panteón descansa su padre, a quien le irá a dejar flores este sábado.

En tanto, cerca de esta casa de la privada Emiliano Zapata, la iglesia con dos torres de tres niveles, flamea una bandera mexicana. En su interior, una placa de mármol destaca por su inscripción dedicada al sacerdote Enrique Meza Pérez y fechada en 1969.

"Gratitud del pueblo de Canoa. La Divina Providencia nos trajo al sacerdote don Enrique Meza P. el 17 de agosto de 1961. Gracias, mil veces gracias a Dios (...)
Y no sólo subraya eso, también establece:

"Con la venia del Señor, su celo sacerdotal, bondad, generosidad y sencillez que le caracterizan, ha sido siempre grande y supo conquistar muy pronto al rico para ayudar al pobre, al letrado para enseñar al ignorante. Su lema: unión, pureza, fuerza, progreso, felicidad".

El remate deja en claro el punto de vista del pueblo o, al menos, de los mayordomos:
"Este sacerdote conoció, sintió y convivió con nuestra miseria y supo remediarla. Nos dio carretera, luz, agua potable, casa cural, colegio de artes y oficio. Las espinas de la ingratitud, calumnia, mentira y traición siempre perdonó".
A 45 años de distancia, el linchamiento en Canoa no ha sido olvidado, aunque la gente de este pueblo trata de borrarlo con el olvido.

No hay comentarios:

Publicar un comentario